Fecha: 27 de Octubre de 2020
La incertidumbre que vive en estos momentos la plantilla con respecto a la reincorporación al puesto de trabajo de forma presencial roza el esperpento. Las decisiones que toma la empresa y, reiteramos, la empresa, en el ámbito del Comité Central de Seguridad y Salud (CCSS) junto a sus marionetas sindicales nos deja a trabajadoras y trabajadores en el mayor dilema sobre cuándo y de qué manera nos debemos reincorporar. Pero sobretodo, y en este punto existe un absoluto mutismo, sobre nuestra vinculación a nuestro puesto físico de trabajo que, en definitiva, es lo que nos asegura nuestra relación laboral tal y como se entiende hasta ahora.
Los palos de ciego del CCSS se repiten cada vez que las autoridades sanitarias toman una decisión sobre las cuestiones que afectan a la movilidad, algo que demuestra su falta de previsión. Una consecuencia, también, de que en este órgano no exista un sindicato como AST del que fue excluido por acuerdo de CCOO y UGT tras las últimas elecciones. Estos sindicatos se limitan a corroborar lo que la empresa decide, sin aportar nada que pueda defender mínimamente la seguridad y salud a los trabajadores/as.
Y mientras en este Comité estatal acatan los vaivenes del Plan #Recomenzamos, en las diferentes provincias (por ejemplo, CCOO en Madrid) desean presentarse ante la plantilla con la otra cara, “demandando coherencia”. Una coherencia que más les valdría tener entre ellos, entre sus órganos estatales y sus representantes provinciales. Una forma de hacer sindicalismo que intenta confundir y distraer a los trabajadores/as, presentándose como sindicato colaboracionista en el ámbito estatal y reivindicativo en el más local. En el fondo, contribuyendo a la inseguridad que padecemos trabajadores y trabajadoras, y a fin de cuentas reforzando las propuestas de la empresa.
AST tenemos capacidad de intervención porque en el Comité Provincial de Seguridad y Salud de Madrid, la empresa no lo tiene tan fácil para imponer sus decretos. Nuestras intervenciones y propuestas contrastan con las del resto de sindicatos que se limitan a oír y callar, aunque luego se presenten ante trabajadores/as como los adalides de las reivindicaciones. Ya en el mes de agosto propusimos más previsión ante el avance de la pandemia con la puesta en marcha de tres escenarios (optimista, medio y pesimista) y que se fuera implementando con al menos 15 días de antelación para que trabajadoras y trabajadores fueran adaptando sus circunstancias familiares y personales al mismo. Ni la empresa ni el resto de sindicatos aceptaron esta propuesta acatando las decisiones del Comité Central de Seguridad y Salud, y así nos va. En estos momentos el desconocimiento es total sobre cuándo y en qué condiciones debemos reincorporarnos a nuestro puesto de trabajo y el estado de incertidumbre nos lleva a estar más pendientes de las decisiones políticas y sanitarias a nivel estatal y local que de las órdenes de la empresa divulgadas a través de sus voceros.
En todo caso, la incorporación sólo se pude hacer cuando las condiciones sanitarias lo permitan en función de la evolución epidemiológica, cuando se garantice la debida protección de la salud de todas las plantillas afectadas, cosa que en este momento no se da.
En esta situación de pandemia la empresa se lleva el debate a los foros donde puede manejar la situación con comodidad, gracias al entreguismos de sus sindicatos; despojando a los Comités Provinciales de sus funciones que atañen a las condiciones de trabajo de las plantillas. Ya sabéis que desde AST todo lo que se debate en cualquier foro se hace extensivo a todas y todos, señalando, no sólo el despotismo de la empresa, sino también la verdadera cara de quienes siguen haciendo seguidismo para imponer su nueva política de relaciones laborales.
Es muy importante la presencia de sindicatos como AST en estos órganos donde se toman decisiones, todas ellas en contra de nuestros intereses. Por eso es también transcendental tu afiliación así como tu participación en un sindicato que sigue estando al lado de trabajadoras y trabajadores.
¡¡LOS DERECHOS NO SE VENDEN, SE DEFIENDEN!!
¡LA ÚNICA LUCHA QUE SE PIERDE ES LA QUE SE ABANDONA!